Aunque es mi costumbre escribir sobre aspectos relacionados con mi desempeño profesional y empresarial, para el presente artículo me puse a investigar cómo poder compenetrarme con lo que siempre vi como actividades que realizamos, por definición, sin aspiraciones productivas, sino como una forma de recreación, por el mero gusto de hacerlas y brindarles una lectura que además de agradable, fuera para ustedes constructiva.
Comencé investigando si existían emprendimientos que nacieran de la práctica de los hobbies y fue así como encontré, entre muchos otros ejemplos, a Nike. Su fundador Phil Knight era un corredor apasionado; él comenzó importando zapatillas para atletismo desde Japón bajo la marca Blue Ribbon Sports, que luego se convirtió en Nike.
Su pasión por el running ayudó a formar la visión y ese enfoque tan particular que tienen los productos de su empresa. También Steve Jobs y Steve Wozniak, iniciaron Apple en el garaje de Jobs, donde ambos compartían un interés en la electrónica y la informática como un hobby.
Continuando con mi investigación, encontré muchas ventajas de practicar hobbies y que no solo nos hacen más felices, sino que ayudan a enriquecer nuestra vida profesional y empresarial. Estas actividades que elegimos para despejar la mente y alimentar pasiones personales pueden ser una herramienta poderosa para mejorar nuestra habilidad para resolver problemas, desarrollar el pensamiento disruptivo, ayudarnos a pensar fuera de la caja y fomentar la innovación.
Los hobbies permiten una desconexión del intenso ritmo de la vida corporativa, lo cual es esencial para mantener una mente aguda y evitar el agotamiento. Nos ofrecen una pausa necesaria de las pantallas y los números, de los problemas y los retos, permitiéndonos volver al trabajo con una perspectiva fresca y renovada.
Este descanso mental estimula la creatividad, mejora nuestro enfoque y prepara nuestra mente y cuerpo para enfrentar desafíos complejos con una nueva perspectiva y una mentalidad clara.
A menudo, fluyen en estos momentos, brillantes ideas o alternativas de solución que no habíamos considerado. Con la mente consiente enfocada en algo diferente, nuestro inconsciente toma el control y nos trae a colación recuerdos o ideas que no fluirían si estuviéramos inmersos en la situación. ¡Nos ayuda a pensar fuera de la caja!
Finalmente, pero no menos importante, compartir un interés común en ese hobby, facilita una conexión más natural y relajada, pues nos identificamos como una tribu urbana con gustos, intereses y actividades comunes que nutren nuestra salud mental y ofrecen una salida placentera a la rutina del día a día.
Los hobbies suelen ser excelentes para adquirir capital relacional, (networking) y desarrollar relaciones duraderas y fructíferas: así que, la próxima vez que sientas culpa por tomar ese tiempo para ti disfrutando de tu hobby favorito, recuerda que no solo es un descanso, es parte de tu desarrollo como persona, como profesional, como empresario y como ser social.
Incluir aquí foto de buceo.